En un mercado global cada vez más complejo, conectado y vertiginoso, las empresas líderes buscan inteligencia basada en la ubicación para impulsar el crecimiento del mercado, fortalecer las operaciones y mejorar su resiliencia. Las organizaciones más competitivas utilizan inteligencia empresarial espacial para obtener información única y revelar relaciones y patrones ocultos para impulsar una toma de decisiones más rápida y fundamentada. Cuando se combina con herramientas de inteligencia empresarial, la ubicación es el denominador común que conecta a las empresas con sus clientes, las operaciones y los riesgos potenciales. Los analistas pueden entender por qué los negocios se dan donde se dan y predecir dónde se darán después.